No existe una ley a nivel nacional que prohíba las barbacoas en propiedades privadas, por lo que, en principio, es legal siempre que la barbacoa se encienda en un área privada como el propio balcón, jardín o terraza en lugar de una compartida en la comunidad.
De hecho, es mucho más seguro hacer una barbacoa en el balcón que en el campo. La ley, que prohíbe hacerlas en terreno forestal entre el 1 de junio y hasta mediados de septiembre, no especifica ninguna prohibición para hacerlas en la terraza, balcón o azotea de nuestra vivienda.
Sin embargo, sí hay que contar con la norma vigente en cada localidad o comunidad. En el caso de Cataluña aplica el Artículo 553-40 del régimen jurídico de la propiedad horizontal sobre las prohibiciones y restricciones de uso de los elementos privativos y comunes.
Por tanto, si se vive en un bloque de pisos donde los balcones son muy pequeños o están situados muy juntos, los vecinos podrían quejarse razonablemente si el olor y el humo de nuestra barbacoa entrara en su espacio habitable a través de una ventana abierta. Existe de hecho algún precedente de jueces que han multado la práctica de hacer barbacoas en un piso donde otros pueden verse afectados.
Y, aunque no haya una prohibición expresa en los estatutos de la comunidad de propietarios sobre el uso de barbacoas, los vecinos, a través del presidente de la comunidad, pueden pedir que no las hagamos y, si se insiste en hacerlas, se suele acabar prohibiéndolo expresamente en los estatutos.
¿Qué barbacoas se pueden utilizar en las terrazas?
En el caso de que la comunidad lo permita, hay que buscar siempre el mejor sitio para ponerla. En este punto, las barbacoas de obra no están autorizadas porque azoteas, balcones y terrazas son considerados como parte de la fachada del inmueble, por lo que para instalar una barbacoa fija se necesitaría el permiso del Ayuntamiento.
También conviene seguir algunas medidas básicas para evitar y prevenir incendios: encender el carbón o la leña de forma adecuada, sin utilizar combustibles u otros elementos para acelerar el proceso de combustión y que puedan contribuir a su descontrol. No perder de vista el fuego en ningún momento y mantenerlo controlado. Una vez se haya cocinado es conveniente extender las brasas hacia el fondo para que no se caigan fuera. Comprobar que las brasas se han enfriado y apagado y no hacerlas en días muy calurosos o con mucho viento.
A la hora de elegir las barbacoas más adecuadas para evitar el humo podemos optar por una barbacoa eléctrica. Funciona por cable, con lo que también hay que asegurarse de tener un enchufe cerca o un buen alargador. Existen diferentes tamaños y algunas de ellas son portátiles y desmontables. Las hay tipo planchas, que reducen la cantidad de humo que emiten al cocinar, que son por ello las más recomendables en terrazas.